Lecturas en el límite. Diálogos entre tipografía y el libro arte, 2017
Los cambios tecnológicos influyen en el proceso de creación, producción y distribución de todo objeto cultural. Molestas para algunos y adecuadas para otros, estas influencias presentes en todas las épocas y en todas las disciplinas, son adoptadas o rechazadas por la sociedad. El caso de la fundición de tipos móviles es un claro ejemplo de esto. Sabemos por la carta que Benjamin Franklin escribió al experto calígrafo John Baskerville en 1760, que las reacciones hacia su fundición de tipos móviles mucho más afilados y contrastados que los hechos hasta entonces, fueron bastante negativas.
Lo cierto es que muchas de las características del tipo móvil de Baskerville responden a los avances tecnológicos de la época en cuanto a fundición se refiere, es decir, a la capacidad de fundir el metal de manera cada vez mas maleable y controlada, sabemos también, que esto provocó reacciones entre la sociedad de la época.
Actualmente, los avances tecnológicos en materia de producción de conocimiento y velocidad con la que las obras son compartidas a través de Internet, así como la democratización de los medios de producción, suponen quizá uno de los cambios más radicales para la producción editorial desde los tiempos de la imprenta, y con ello, múltiples debates. Los libros electrónicos han generado discusiones sobre la posible muerte de los libros en papel y más aún, en cómo se llevará a cabo la conservación de dichos materiales que ahora, están expuestos en soportes “intangibles”.